10. Jennifer López y Chris Judd
Ahí los tenéis, monísimos de la muerte y contentísimos. A J-Lo le duró su segunda boda con este bailarín lo que dura un embarazo, 9 meses. Aunque tampoco es que le durara mucho la primera con el “superviviente” Ojani Noa, que no llegó al año. Mark Anthony está batiendo records por lo que veis.
9. Renée Zellweger y Kenny Chesney
Fue novia de Jim Carrey y siempre se ha dicho que entre ella y George Clooney ha habido más que algún que otro café, pero el único que consiguió que se vistiera de blanco (un expléndido Carolina Herrera, dicho sea de paso) fue el calvo cantante de country Kenny Chesney. Se conocieron en enero de 2005 en un acto benéfico a favor del tsunami de Indonesia. Se casaron el 5 de mayo y se divorciaron el 20 de diciembre. Si las matemáticas no fallan eso son siete meses y 19 días.
8. Pamela Anderson y Kid Rock
Se casaron de esa guisa en un yate en Saint-Tropez y el matrimonio en cuestión duró 7 meses desde la fecha en que lo hicieron oficial en USA. Mucho gasto en traje de novia no hizo, pero vamos tan escasito como el bikini de la rubia. Después se casó con Rick Salomon en Las Vegas, en el descanso de su trabajo, y este le duró 6 meses y 18 días.
7. Drew Barrymore y Tom Green
Otra experta en bodas fugaces. Menos que un caramelo a la puerta de un colegio le duran los maridos a la niña de ET. Con este cómico estuvo casada 4 meses y 8 días, aunque si contamos desde la primera vez que se casaron, típica boda-fuga-no-válida, nos salen tres meses más. Era el segundo matrimonio para Drew.
6. Dennis Rodman y Carmen Electra
Jamona y vigilante de la playa ella. Genio y figura extravagante del baloncesto él, el perfecto lugarteniente de Michael Jordan. Se casaron en Las Vegas y él pidió el divorcio a los 9 días diciendo que estaba completamente borracho y que no se había enterado de nada. Aún así aguantaron juntos 4 meses más. Se notaría algo más sobrio, no sé.
5. Nicolas Cage y Lisa-Marie Presley
Auténtico fan de Elvis, no pudo resistirse a los encantos de su hija y es lo que tienen estas bodas basadas en mitos, que claro, se caen (que se lo digan a ella con Michael Jackson, con el que estuvo casada dos años y algo). Tres meses y 15 días duró la boda, que se celebrara en Hawaii, aunque el divorcio no se hizo efectivo hasta bastante tiempo después.
4. Ronaldo y Daniella Ciccarellli
Esto es el claro ejemplo de rápido divorcio que llega después de una no-boda. Porque mucho palacio de Chantilly (si no hay castillo bueno es un palacio), 250 invitados de todos los pelajes, pero el pollo no estaba divorciado aún, así que fue paripé del bueno. Y algo más sencillo terminarlo todo cuando se les acabó el amor, dijeron, 86 días después.
3. Drew Barrymore y Jeremy Thomas
Seguimos reduciendo tiempos y de nuevo tenemos a la niña de ET, que en su primer matrimonio, suponemos que feliz aquel día, aguantó la convivencia marital nada más y nada menos que 19 días. Supongo que si decide pasar por el altar una tercera vez, no dirá la parte esa de “hasta que la muerte nos separe”, porque vamos, vivos quedan, pero durar duran poco.
2. Eddie Murphy y Tracey Edmonds
Este es otro caso de boda/no-boda. Se casaron el día de año nuevo en Bora-Bora, que siempre queda más bonito en el álbum que Wichita por ejemplo, y 15 días después, sin ni siquiera haber hecho efectivo el matrimonio en USA, emitieron comunicado contándonos que vale, que se querían mucho, pero que preferían ser sólo amigos.
1. Britney Spears y Jason Allen Alexander
El indiscutible número uno de los raudos y veloces matrimonios que estamos repasando es para Britney y su primer amor del instituto. En Las Vegas, como mandan los cánones de boda fugaz y con una duración de ¡¡¡55 horas!!!, aunque a las 2 horas la princesa del pop ya había pedido la anulación. Rápido se les pasó el amor.